"Mi comienzo en el yoga fue con el único objetivo de mover el cuerpo, hacer algo de deporte, el rollo mental y meditación no entraba para nada en mi cabeza, porque además no creía en ese rollo. Estuve un año acudiendo a clases, me encantaba las posturas, pero nada más.
Tras dejarlo un par de años, lo retome porque necesitaba hacer algo y además me había dado cuenta que me gustaba más de lo que yo pensaba, pero cuando volví a empezar esta vez mi cuerpo y mi mente buscaba algo más que una postura, necesitaba encontrar mi paz y vaya si la encontré, a marcado un antes y un después, porque a parte de las experiencias que he podido comprobar en mi propio cuerpo y mente, he aprendido a quererme más, a dar importancia a lo que lo tiene, a saber decir hasta aquí sin miedos y sentir una seguridad en misma que antes no había tenido. Para mí ha sido un gran cambio en mi vida el cual no quiero ni puedo dejar. Debo de decir que aunque solo he hecho yoga con Vicky he de decir que no decir hacer yoga es experimentar esto siempre, influye la monitora, el espacio y sobre todo el grupo. Una vez más gracias Vicky"